La rutina muchas veces nos juega una mala pasada, especialmente si estamos acostumbrados a estar disponibles y conectados las 24 horas del día, algo que no es sano ni para nosotros ni para nuestro entorno. Es por esto que incluso si recibimos un mensaje de trabajo estando de vacaciones sentimos la necesidad de responderlo, bien por compromiso o por miedo a ser despedido si no lo hacemos.
Sin embargo, aunque la Ley Orgánica 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos y Garantías de los Derechos Digitales establece que la desconexión digital es un derecho de los trabajadores para “el respeto de su tiempo de descanso”, no son pocos los empleados que reciben Whatsapps de su jefe durante sus vacaciones, en este caso, navideñas. Al llegar estas fechas son muchos los que deciden tomarse unos días para desconectar del ámbito laboral, pero no siempre pueden desligarse del trabajo por completo.
Desgraciadamente, contestar llamadas o mensajes de trabajo durante las cenas de Nochebuena, Nochevieja, con amigos, etc., se está volviendo un escenario habitual. En este sentido, no es extraño descubrir que seis de cada diez empleados (59%) reconoce no desconectar durante su periodo de descanso vacacional. Así se extrae de un informe de Infojobs, que sitúa a los que trabajan en sectores con alta demanda durante la campaña navideña (compras, logística, almacén, atención al cliente, etc.) como los que más sufren los estragos del “blurring”, fenómeno que se da cuando la frontera entre el trabajo y la vida personal se difumina.
Perfiles de alta responsabilidad, los que menos desconectan
A nivel general, los perfiles que menos desconectan son los de dirección, gerencia o consejo de administración, pues prácticamente la mitad de ellos (47%) declara conectarse siempre que sea necesario en vacaciones, porcentaje que baja hasta el 30% en el caso de los mandos intermedios. Aún así, los autónomos son los peores parados, ya que nueve de cada 10 asegura no desconectar del trabajo fuera de su horario laboral, una tendencia ligada directamente con sus responsabilidades.
Más allá de la alta demanda y la responsabilidad, existen ciertos trabajos en los que cuesta todavía más desconectar, sobre todo los que tienen tareas que requieren una disponibilidad constante o suponen altas cargas de trabajo. Es el caso de los profesionales de la salud, los perfiles vinculados a la abogacía, los profesionales de marketing y medios digitales o incluso los periodistas.
En lo que a motivos se refiere, el 42% de los trabajos sitúa al sentimiento de obligación como primera razón para la no desconexión, a la que le sigue la presión de su puesto (33%) y la realización de asuntos pendientes por resolver (22%).
Dejar todo organizado antes de las vacaciones
Aunque lo idílico sería conseguir la desconexión al 100%, lo cierto es que muchas veces es complicado. Lo mejor es dejar organizado el espacio de trabajo antes de las vacaciones para que nuestros compañeros sepan donde está cada archivo y establecer qué situaciones serían una emergencia, en caso de que la hubiera. Asimismo, durante las vacaciones es aconsejable dejar el móvil del trabajo en casa y establecer ciertos horarios para revisar correos.
El sentimiento de obligación, la presión de su puesto y la realización de asuntos pendientes por resolver son los principales motivos que impiden descansar a muchos profesionales, según Infojobs
La rutina muchas veces nos juega una mala pasada, especialmente si estamos acostumbrados a estar disponibles y conectados las 24 horas del día, algo que no es sano ni para nosotros ni para nuestro entorno. Es por esto que incluso si recibimos un mensaje de trabajo estando de vacaciones sentimos la necesidad de responderlo, bien por compromiso o por miedo a ser despedido si no lo hacemos.
Sin embargo, aunque la Ley Orgánica 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos y Garantías de los Derechos Digitales establece que la desconexión digital es un derecho de los trabajadores para “el respeto de su tiempo de descanso”, no son pocos los empleados que reciben Whatsapps de su jefe durante sus vacaciones, en este caso, navideñas. Al llegar estas fechas son muchos los que deciden tomarse unos días para desconectar del ámbito laboral, pero no siempre pueden desligarse del trabajo por completo.
Desgraciadamente, contestar llamadas o mensajes de trabajo durante las cenas de Nochebuena, Nochevieja, con amigos, etc., se está volviendo un escenario habitual. En este sentido, no es extraño descubrir que seis de cada diez empleados (59%) reconoce no desconectar durante su periodo de descanso vacacional. Así se extrae de un informe de Infojobs, que sitúa a los que trabajan en sectores con alta demanda durante la campaña navideña (compras, logística, almacén, atención al cliente, etc.) como los que más sufren los estragos del “blurring”, fenómeno que se da cuando la frontera entre el trabajo y la vida personal se difumina.
Perfiles de alta responsabilidad, los que menos desconectan
A nivel general, los perfiles que menos desconectan son los de dirección, gerencia o consejo de administración, pues prácticamente la mitad de ellos (47%) declara conectarse siempre que sea necesario en vacaciones, porcentaje que baja hasta el 30% en el caso de los mandos intermedios. Aún así, los autónomos son los peores parados, ya que nueve de cada 10 asegura no desconectar del trabajo fuera de su horario laboral, una tendencia ligada directamente con sus responsabilidades.
Más allá de la alta demanda y la responsabilidad, existen ciertos trabajos en los que cuesta todavía más desconectar, sobre todo los que tienen tareas que requieren una disponibilidad constante o suponen altas cargas de trabajo. Es el caso de los profesionales de la salud, los perfiles vinculados a la abogacía, los profesionales de marketing y medios digitales o incluso los periodistas.
En lo que a motivos se refiere, el 42% de los trabajos sitúa al sentimiento de obligación como primera razón para la no desconexión, a la que le sigue la presión de su puesto (33%) y la realización de asuntos pendientes por resolver (22%).
Dejar todo organizado antes de las vacaciones
Aunque lo idílico sería conseguir la desconexión al 100%, lo cierto es que muchas veces es complicado. Lo mejor es dejar organizado el espacio de trabajo antes de las vacaciones para que nuestros compañeros sepan donde está cada archivo y establecer qué situaciones serían una emergencia, en caso de que la hubiera. Asimismo, durante las vacaciones es aconsejable dejar el móvil del trabajo en casa y establecer ciertos horarios para revisar correos.
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