Invertir es una buena manera de combatir la inflación. Así lo confirman los expertos en la materia, que aseguran que la subida de los precios va a ser la tónica general durante los próximos años. La recomendación es informarse sobre cómo iniciar en este mundo, y dar un paso adelante para tratar de asegurar el futuro.
Sin embargo, existen muchas posibilidades a la hora de invertir. Desde aportar dinero a fondos indexados hasta invertir en inmuebles, es decir, bienes materiales que producirán un gran beneficio en el futuro. Pero una de las más recomendadas es la que tiene que ver con la compra de oro.
Muchos se preguntan si vale la pena invertir en este metal, y por ello el inversor José Luis Díaz ha resuelto todas las dudas, posicionándose totalmente a favor.
La oro, una ganancia segura según el experto
«Los inversores con alto patrimonio no ven el oro como una apuesta especulativa, sino como un seguro de vida para su riqueza«, asegura José Luis Díaz. Y es que para el experto, el oro es una pieza clave en las carteras de alto patrimonio.
La realidad es que el precio de este metal se encuentra en máximos históricos, y no existe previsión de que este valor vaya a bajar. A pesar de ello, algunas personas ven el oro como un activo del pasado. Un pensamiento que Díaz considera erróneo. «La idea de que el oro físico es cosa del pasado viene principalmente de quienes confunden inversión con especulación”, declara.
Dos formas de invertir en oro
Aquellos que quieren aprovechar esta posible oportunidad y apostar por el metal deben saber que existen dos formas de invertir en oro: comprar lingotes físicos u operar con activos financieros como acciones de empresas del sector o ETF.
La principal ventaja de comprar oro físico es que su propietario tiene un mayor control sobre él, ya que sólo dependerá del precio directo del metal precioso, a lo que habría que añadir como gasto, eso sí, las comisiones de compra y los costes de seguridad. Sin embargo, la gran desventaja es su seguridad. Debido a su alto valor, guardarlo puede suponer un quebradero de cabeza para el inversor.
Por su parte, la otra opción es invertir en oro a través de productos de inversión como las acciones o los ETF. En estos casos el usuario no compra onzas o lingotes del metal precioso, sino activos financieros que trabajan con él.
Su principal ventaja es la comodidad, puesto que no es necesario acudir a ningún comercio especializado o recibir mediante correo certificado ningún lingote. No obstante, el mayor inconveniente es que el valor de la operación se puede ver afectado, ya que depende de terceros.
Es recomendable invertir en oro
Ante la duda de muchos, invertir en oro suele ser una buena opción casi siempre, pues se trata de un activo bastante estable que, pese a sufrir caídas de valor de vez en cuando en el corto plazo, presenta una evolución al alza constante a lo largo del tiempo.
En este caso, suele ser un activo muy empleado para estrategias a largo plazo. Por ello, el experto en inversión asegura que «comprar oro siempre es una gran idea«.
La importancia de tener oro físico
Sin embargo, a pesar de que es posible la compra a partir de intermediarios, la realidad es que lo ideal es tener el activo de forma física, sin que nadie lo gestione. El experto recomienda que los ciudadanos sean propietarios directos del oro para evitar depender de la gestión de terceros.
“Tus acciones dependen de empresas, tus bonos de gobiernos, pero tu oro es tuyo independientemente de lo que pase en el sistema” asegura José Luis Díaz, apuntando uno de los mayores beneficios de tener el oro en físico.
Problemas de tener oro en físico
A pesar de ser una recomendación, comprar oro de manera física conlleva una serie de riesgos. El más palpable es su seguridad. “Guardar oro en casa es tentador pero peligroso. Los seguros domésticos rara vez cubren metales preciosos, y un robo puede arruinar años de inversión”, advierte el experto.
Por ello, algunas opciones para guardar este activo es contratar una caja de seguridad bancaria, pese a que el coste ronde los 500 euros anuales.
El oro como seguro de vida
Por último, el experto explica que el oro es un bien muy seguro y que nunca falla. Tal y como expone, es en los peores momentos cuando este metal muestra su verdadero valor. «El oro brilla especialmente en tres escenarios que todo inversor experimentará múltiples veces en su vida: crisis de confianza en el sistema financiero, períodos de alta inflación y colapsos simultáneos de acciones y bonos», confirma.
Uno de los ejemplos más claros es tras la crisis de 2008. En aquel momento, el S&P 500 caía de manera exponencial mientras que el oro incrementaba su valor un 5%. Se trata de uno de los muchos ejemplos que demuestran la seguridad que ofrece este activo, y es por ello que muchos inversores apuestan por él a la hora de invertir.
El experto en inversiones asegura que el oro es un activo seguro en el tiempo
Invertir es una buena manera de combatir la inflación. Así lo confirman los expertos en la materia, que aseguran que la subida de los precios va a ser la tónica general durante los próximos años. La recomendación es informarse sobre cómo iniciar en este mundo, y dar un paso adelante para tratar de asegurar el futuro.
Sin embargo, existen muchas posibilidades a la hora de invertir. Desde aportar dinero a fondos indexados hasta invertir en inmuebles, es decir, bienes materiales que producirán un gran beneficio en el futuro. Pero una de las más recomendadas es la que tiene que ver con la compra de oro.
Muchos se preguntan si vale la pena invertir en este metal, y por ello el inversor José Luis Díaz ha resuelto todas las dudas, posicionándose totalmente a favor.
La oro, una ganancia segura según el experto
«Los inversores con alto patrimonio no ven el oro como una apuesta especulativa, sino como un seguro de vida para su riqueza«, asegura José Luis Díaz. Y es que para el experto, el oro es una pieza clave en las carteras de alto patrimonio.
La realidad es que el precio de este metal se encuentra en máximos históricos, y no existe previsión de que este valor vaya a bajar. A pesar de ello, algunas personas ven el oro como un activo del pasado. Un pensamiento que Díaz considera erróneo. «La idea de que el oro físico es cosa del pasado viene principalmente de quienes confunden inversión con especulación”, declara.
Dos formas de invertir en oro
Aquellos que quieren aprovechar esta posible oportunidad y apostar por el metal deben saber que existen dos formas de invertir en oro: comprar lingotes físicos u operar con activos financieros como acciones de empresas del sector o ETF.
La principal ventaja de comprar oro físico es que su propietario tiene un mayor control sobre él, ya que sólo dependerá del precio directo del metal precioso, a lo que habría que añadir como gasto, eso sí, las comisiones de compra y los costes de seguridad. Sin embargo, la gran desventaja es su seguridad. Debido a su alto valor, guardarlo puede suponer un quebradero de cabeza para el inversor.
Por su parte, la otra opción es invertir en oro a través de productos de inversión como las acciones o los ETF. En estos casos el usuario no compra onzas o lingotes del metal precioso, sino activos financieros que trabajan con él.
Su principal ventaja es la comodidad, puesto que no es necesario acudir a ningún comercio especializado o recibir mediante correo certificado ningún lingote. No obstante, el mayor inconveniente es que el valor de la operación se puede ver afectado, ya que depende de terceros.
Es recomendable invertir en oro
Ante la duda de muchos, invertir en oro suele ser una buena opción casi siempre, pues se trata de un activo bastante estable que, pese a sufrir caídas de valor de vez en cuando en el corto plazo, presenta una evolución al alza constante a lo largo del tiempo.
En este caso, suele ser un activo muy empleado para estrategias a largo plazo. Por ello, el experto en inversión asegura que «comprar oro siempre es una gran idea«.
La importancia de tener oro físico
Sin embargo, a pesar de que es posible la compra a partir de intermediarios, la realidad es que lo ideal es tener el activo de forma física, sin que nadie lo gestione. El experto recomienda que los ciudadanos sean propietarios directos del oro para evitar depender de la gestión de terceros.
“Tus acciones dependen de empresas, tus bonos de gobiernos, pero tu oro es tuyo independientemente de lo que pase en el sistema” asegura José Luis Díaz, apuntando uno de los mayores beneficios de tener el oro en físico.
Problemas de tener oro en físico
A pesar de ser una recomendación, comprar oro de manera física conlleva una serie de riesgos. El más palpable es su seguridad. “Guardar oro en casa es tentador pero peligroso. Los seguros domésticos rara vez cubren metales preciosos, y un robo puede arruinar años de inversión”, advierte el experto.
Por ello, algunas opciones para guardar este activo es contratar una caja de seguridad bancaria, pese a que el coste ronde los 500 euros anuales.
El oro como seguro de vida
Por último, el experto explica que el oro es un bien muy seguro y que nunca falla. Tal y como expone, es en los peores momentos cuando este metal muestra su verdadero valor. «El oro brilla especialmente en tres escenarios que todo inversor experimentará múltiples veces en su vida: crisis de confianza en el sistema financiero, períodos de alta inflación y colapsos simultáneos de acciones y bonos», confirma.
Uno de los ejemplos más claros es tras la crisis de 2008. En aquel momento, el S&P 500 caía de manera exponencial mientras que el oro incrementaba su valor un 5%. Se trata de uno de los muchos ejemplos que demuestran la seguridad que ofrece este activo, y es por ello que muchos inversores apuestan por él a la hora de invertir.
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