El empresario y conocido inversor José Elías ha generado revuelo en el ámbito empresarial y social tras sus recientes declaraciones en el podcast Búscate la vida. Sus comentarios, que comparan de forma directa la situación de los abogados que trabajan en grandes despachos con la de los electricistas, han provocado una discusión sobre la idealización de ciertas profesiones y la verdadera calidad de vida que estas ofrecen.
Elías puso el foco en la cantidad de horas que dedican algunos profesionales de élite. Según el empresario, la creencia popular de que un puesto de alto nivel asegura una vida mejor podría no ajustarse a la realidad, especialmente cuando se consideran las extenuantes jornadas laborales a las que se enfrentan.
La polémica reflexión del empresario ha calado hondo, invitando a una revisión de los paradigmas de éxito profesional comúnmente aceptados. Sus palabras han abierto una ventana a un análisis más profundo sobre el bienestar, el tiempo libre y la autonomía en el entorno laboral español.
El valor del oficio frente a la oficina
Según el empresario, muchos abogados de firmas de renombre dedican entre 16 y 17 horas diarias a su trabajo, una dedicación que, a su juicio, no se traduce necesariamente en una mejor existencia personal o familiar respecto a otros oficios. Elías puso el ejemplo de que esta intensidad de trabajo, aunque se dé en un sector de prestigio, no siempre implica un bienestar superior.
El empresario argumentó que la percepción del éxito está distorsionada y defendió que la denominada «mentalidad de electricista» es más sólida de lo que se piensa. En este sentido, Elías afirmó que no conoce a ningún electricista que, por ejemplo, no tenga piso propio, sugiriendo que la estabilidad económica y residencial es una realidad para estos profesionales.
José Elías también enfatizó el poder de negociación que poseen los profesionales de oficios cualificados. Un electricista competente, si siente que no es bien remunerado, puede ejercer su poder de negociación con facilidad, incluso planteándose trabajar por su cuenta para obtener ingresos similares o superiores.
En cuanto a la retribución, Elías estimó que un electricista cualificado puede aspirar a un sueldo base de al menos 1.700 euros al mes, y que este ingreso puede complementarse con trabajos adicionales. Explicó que muchos electricistas realizan «remiendos» o pequeños encargos durante los fines de semana o fuera de su jornada principal, por los que pueden obtener unos 600 euros extras.
Frente a la rutina de profesiones como la abogacía o la auditoría, caracterizadas a menudo por jornadas interminables, Elías ensalzó la rutina más equilibrada de los trabajadores manuales. Bromeó con la idea de que un electricista puede completar su jornada laboral de nueve horas, incluyendo un tiempo para el desayuno, lo que le permite disfrutar de un mejor balance entre vida profesional y personal. Sus declaraciones invitan a reflexionar sobre la verdadera naturaleza del éxito y la felicidad en el trabajo.
El empresario José Elías ha encendido un debate sobre la calidad de vida y el valor del trabajo, poniendo en el punto de mira a profesiones tradicionales
El empresario y conocido inversor José Elías ha generado revuelo en el ámbito empresarial y social tras sus recientes declaraciones en el podcast Búscate la vida. Sus comentarios, que comparan de forma directa la situación de los abogados que trabajan en grandes despachos con la de los electricistas, han provocado una discusión sobre la idealización de ciertas profesiones y la verdadera calidad de vida que estas ofrecen.
Elías puso el foco en la cantidad de horas que dedican algunos profesionales de élite. Según el empresario, la creencia popular de que un puesto de alto nivel asegura una vida mejor podría no ajustarse a la realidad, especialmente cuando se consideran las extenuantes jornadas laborales a las que se enfrentan.
La polémica reflexión del empresario ha calado hondo, invitando a una revisión de los paradigmas de éxito profesional comúnmente aceptados. Sus palabras han abierto una ventana a un análisis más profundo sobre el bienestar, el tiempo libre y la autonomía en el entorno laboral español.
Según el empresario, muchos abogados de firmas de renombre dedican entre 16 y 17 horas diarias a su trabajo, una dedicación que, a su juicio, no se traduce necesariamente en una mejor existencia personal o familiar respecto a otros oficios. Elías puso el ejemplo de que esta intensidad de trabajo, aunque se dé en un sector de prestigio, no siempre implica un bienestar superior.
El empresario argumentó que la percepción del éxito está distorsionada y defendió que la denominada «mentalidad de electricista» es más sólida de lo que se piensa. En este sentido, Elías afirmó que no conoce a ningún electricista que, por ejemplo, no tenga piso propio, sugiriendo que la estabilidad económica y residencial es una realidad para estos profesionales.
José Elías también enfatizó el poder de negociación que poseen los profesionales de oficios cualificados. Un electricista competente, si siente que no es bien remunerado, puede ejercer su poder de negociación con facilidad, incluso planteándose trabajar por su cuenta para obtener ingresos similares o superiores.
En cuanto a la retribución, Elías estimó que un electricista cualificado puede aspirar a un sueldo base de al menos 1.700 euros al mes, y que este ingreso puede complementarse con trabajos adicionales. Explicó que muchos electricistas realizan «remiendos» o pequeños encargos durante los fines de semana o fuera de su jornada principal, por los que pueden obtener unos 600 euros extras.
Frente a la rutina de profesiones como la abogacía o la auditoría, caracterizadas a menudo por jornadas interminables, Elías ensalzó la rutina más equilibrada de los trabajadores manuales. Bromeó con la idea de que un electricista puede completar su jornada laboral de nueve horas, incluyendo un tiempo para el desayuno, lo que le permite disfrutar de un mejor balance entre vida profesional y personal. Sus declaraciones invitan a reflexionar sobre la verdadera naturaleza del éxito y la felicidad en el trabajo.
Noticias de Economía Nacional e Internacional en La Razón