Cuando uno sale del Aeropuerto Internacional de Miami, hay una estructura a la derecha de la carretera que llama poderosamente la atención. Es un coliseo que está tomando forma en el corazón de una ciudad que se ha transformado a pasos agigantados en los últimos años. Y lo ha hecho, sobre todo, con emblemas arquitectónicos como el Aston Martin Residences, finalizado en 2024. Ese templo que se avista es el Miami Freedom Park, un complejo que aspira a revolucionar el consumo del fútbol en EEUU, como ya está haciendo Inter Miami gracias al ‘efecto Messi’. Cuando uno sale del Aeropuerto Internacional de Miami, hay una estructura a la derecha de la carretera que llama poderosamente la atención. Es un coliseo que está tomando forma en el corazón de una ciudad que se ha transformado a pasos agigantados en los últimos años. Y lo ha hecho, sobre todo, con emblemas arquitectónicos como el Aston Martin Residences, finalizado en 2024. Ese templo que se avista es el Miami Freedom Park, un complejo que aspira a revolucionar el consumo del fútbol en EEUU, como ya está haciendo Inter Miami gracias al ‘efecto Messi’.
Cuando uno sale del Aeropuerto Internacional de Miami, hay una estructura a la derecha de la carretera que llama poderosamente la atención. Es un coliseo que está tomando forma en el corazón de una ciudad que se ha transformado a pasos agigantados en los últimos años. Y lo ha hecho, sobre todo, con emblemas arquitectónicos como el Aston Martin Residences, finalizado en 2024. Ese templo que se avista es el Miami Freedom Park, un complejo que aspira a revolucionar el consumo del fútbol en EEUU, como ya está haciendo Inter Miami gracias al ‘efecto Messi’.
Para entender la dimensión del nuevo escenario hay que tener en cuenta el actual Chase Stadium donde juega sus partidos el equipo estadounidense. Fue inaugurado en Fort Lauderdale en 2020 sobre el antiguo Lockhart Stadium después de construirse en tan solo 10 meses. Desde el principio, la obra fue concebida como una arquitectura modular y temporal, con el objetivo de erigir en el futuro el Miami Freedom Park, que era una realidad en 2026, el año en que EEUU será coanfitrión del Mundial de selecciones.
La primera gran diferencia entre y el nuevo escenario de Inter Miami estará en la capacidad. Mientras que el Chase ha ido ampliando su capacidad hasta los 21.550 espectadores, el nuevo Freedom Park elevará su aforo hasta las 25.000 localidades. Aunque el aumento de asientos no es una prioridad. «Es importante que esté siempre lleno», aseguran desde club, que ha priorizado la funcionalidad de los espacios al número de espectadores. Por eso se ha diseñado una cuidada escala de palcos VIP y zona de Hospitality que alcanzan el medio millón de dólares en el caso más lujoso, cuando se trate de un contrato prolongado.
El complejo, que se está levantando a una velocidad vertiginosa, como afirman los que pasan cada día a su alrededor, está concebido bajo la lógica del entretenimiento estadounidense, pero sin dejar de lado la atmósfera del fútbol. De ahí que en las maquetas se ve como un feudo donde las gradas están cerca del verde. Uno de los fondos es retráctil, pensado para los días en los que haya eventos.
El césped no es retráctil, como sucede con la fórmula del hipogeo que se emplea en campos como el Bernabéu. Florida tiene unas condiciones muy propicias para el crecimiento y mantenimiento de tapetes como el Bermuda, debido al calor que se registra en el área geográfica, que se acompaña de lluvias torrenciales que oxigenan la superficie. Uno de los temas más cuestionados en el Mundial de Clubes.
«Tenemos ya confirmados varios artistas de primer nivel», explican desde un Inter Miami que también ha vendido las suites de nivel de campo, denominadas Field Suites (entre 12 y 18 personas); además de las Sky Boxes (hasta 10 personas). A esto hay que sumarle los Loge Packages o asientos de palco, que se venderán en paquetes de hasta 60.000 dólares. Una mina de ingresos.
Esto permitirá aumentar la facturación con respecto al Chase Stadium hasta en un 40%. El Miami Freedom Park ha sido concebido enteramente por capital privado de la comunidad Beckham-Mas-Fuller y Ares Management. No hay inversión pública, salvo para los accesos del campo, para los el Gobernador DeSantis autorizó una subvención estatal de ocho millones de dólares.
A cambio, el proyecto de Inter Miami tendrá el parque más extenso de la ciudad, el Jorge Mas Canosa Park, bautizado en honor al padre de Jorge Mas, propietario gestor del Inter Miami junto a José Mas y Beckham. Un exiliado cubano que fundó la Cuban American National Foundation. El perfil de los ciudadanos que han ayudado a construir Florida. Ese es el objetivo de Miami Freedom Park, pensado como una estructura que dinamice una zona en la que se ubicaba el Melreese Golf.
Precisamente, el inicio de las obras arrancó en 2023 con la demolición del antiguo campo de golf. Fue más laborioso el proceso burocrático que la ejecución del Miami Freedom Park en sí mismo. El proyecto se aprobó en un referéndum municipal con el 60% de votos a favor. Actualmente, la estructura del campo ya está definida, de ahí que incluso puedan adelantarse los plazos de finalización, previstos inicialmente para la primavera de 2026. Para entonces, Inter Miami espera seguir contando con Messi, piedra angular de un club a la vanguardia, no solo de la MLS, también del ‘soccer’.
Diario de Mallorca – Deportes
