Algo se está haciendo muy bien desde hace tiempo en el arbitraje balear y, más concretamente, en el mallorquín. No se explica de otra manera que, tras años y años sin nadie en la élite del fútbol español, Mallorca cuente ahora con un árbitro en Primera División como Mateu Busquets Ferrer –además de Cuadra Fernández, adscrito al Colegio Balear–, que será internacional a partir de enero, y con dos palmesanos que ascienden a Segunda División (Lluís Bestard Servera) y a Primera Federación (Federico Javier Sáiz Villares) en la misma temporada. Algo se está haciendo muy bien desde hace tiempo en el arbitraje balear y, más concretamente, en el mallorquín. No se explica de otra manera que, tras años y años sin nadie en la élite del fútbol español, Mallorca cuente ahora con un árbitro en Primera División como Mateu Busquets Ferrer –además de Cuadra Fernández, adscrito al Colegio Balear–, que será internacional a partir de enero, y con dos palmesanos que ascienden a Segunda División (Lluís Bestard Servera) y a Primera Federación (Federico Javier Sáiz Villares) en la misma temporada.
Algo se está haciendo muy bien desde hace tiempo en el arbitraje balear y, más concretamente, en el mallorquín. No se explica de otra manera que, tras años y años sin nadie en la élite del fútbol español, Mallorca cuente ahora con un árbitro en Primera División como Mateu Busquets Ferrer –además de Cuadra Fernández, adscrito al Colegio Balear–, que será internacional a partir de enero, y con dos palmesanos que ascienden a Segunda División (Lluís Bestard Servera) y a Primera Federación (Federico Javier Sáiz Villares) en la misma temporada.
El Comité Técnico de Árbitros de la Federació Balear de Futbol tiene motivos de sobra para estar orgulloso. Conseguir colocar a árbitros locales en el fútbol profesional o a sus puertas no es nada sencillo y responde al buen trabajo y, por supuesto, al buen ojo, realizado año tras año. Y es que el caso de Busquets Ferrer, el número 1 del arbitraje mallorquín, es complicado de explicar. Pocos ascensos tan meteóricos como el suyo hay en el mundo de los colegiados nacionales.
Tras subir a Segunda División con 28 años, una sola temporada le bastó para ganarse el ascenso a Primera División –algo que solo había conseguido en su tiempo Iturralde González–. Y ahora, con solo dos cursos en la élite, a partir de enero de 2026 podrá arbitrar encuentros fuera de España. Ha sido incluido en la lista de colegiados internacionales de la FIFA para la temporada 2025/26, por lo que podrá dirigir partidos de competiciones europeas e internacionales como la UEFA Youth League, Conference League o clasificatorios de selecciones, y abre la puerta a una futura participación en Eurocopas y Mundiales. Con este nombramiento, Busquets Ferrer se confirma como una de las promesas más sólidas del arbitraje europeo.
La promoción del mallorquín no fue la única alegría del día de ayer. Y es que en Segunda División habrá otro árbitro de la isla, además de tres asistentes baleares. Después de tres temporadas dirigiendo en Primera Federación, Lluís Bestard dirigirá en la categoría de plata. Su ascenso confirma la consolidación de un perfil técnico sólido, riguroso y comprometido, y supone una nueva incorporación balear al fútbol profesional.

Por otro lado, el CTA también anunció el ascenso de Federico Javier Sáiz Villares a Primera Federación, después de una trayectoria destacada en la que ha dirigido 52 partidos en Segunda Federación, demostrando criterio y consistencia a lo largo de varias temporadas. Junto a él, el árbitro asistente Víctor Morey García ha sido promovido en la misma categoría. En la tercera categoría del fútbol español habrá un total de dos árbitros y cuatro asistentes pertenecientes al CTA de la FFIB.
No acabó ahí la fiesta para el arbitraje balear. Francisco de Asís Vidal Esteban dirigirá partidos en Segunda Federación –en esta categoría hay cinco árbitros y cinco asistentes de Balears–. Estos ascensos se suman a los que ya se dieron a conocer en fútbol sala y fútbol playa: Diego Martínez, árbitro internacional de fútbol sala, mantiene su puesto en la élite después de una trayectoria consolidada.
Sergi Balle, nuevo árbitro de Primera División de Fútbol Playa, debutará esta temporada en la máxima categoría de este deporte. Por otro lado, Silvia Guerrero y Llorenç Rayó han sido promocionados en la Segunda División de Fútbol Playa, reforzando también la presencia balear en este ámbito en constante crecimiento.
Por otro lado, la colegiada mallorquina Amy Peñalver causa baja en la Primera División. En Primera RFEF femenina, la FFIB contará con una árbitra y una asistente balear en la categoría. El arbitraje de las islas está de enhorabuena tras una temporada para enmarcar.
Diario de Mallorca – Deportes