Escándalo en Cincinnati: segundo golpe de calor de un tenista en 24 horas

Sigue el escándalo de Cincinnati y sus temperaturas elevadas. Francisco Comesaña, durante el segundo set de su partido contra el estadounidense Reilly Opelka, tuvo que ser atendido tras sufrir un golpe de calor durante el encuentro. El argentino dominaba el segundo set y se marchó a los vestuarios durante diez minutos para recuperarse. Sigue el escándalo de Cincinnati y sus temperaturas elevadas. Francisco Comesaña, durante el segundo set de su partido contra el estadounidense Reilly Opelka, tuvo que ser atendido tras sufrir un golpe de calor durante el encuentro. El argentino dominaba el segundo set y se marchó a los vestuarios durante diez minutos para recuperarse.  

Sigue el escándalo de Cincinnati y sus temperaturas elevadas. Francisco Comesaña, durante el segundo set de su partido contra el estadounidense Reilly Opelka, tuvo que ser atendido tras sufrir un golpe de calor durante el encuentro. El argentino dominaba el segundo set y se marchó a los vestuarios durante diez minutos para recuperarse.

Cuando el tenista iba a sacar para confirmar el break, se dirigió a un cubo de basura al tener náuseas por el calor. Rápidamente, el juez de línea y los recogepelotas se interesaron por él, que poco a poco fue encontrándose mejor. Como es lógico, tuvo un tiempo médico en el que le tomaron el pulso y verificaron que se encontrara en condiciones para seguir.

«¿Estás mejor? No te me vayas a morir, eh«, dijo en tono sarcástico el entrenador de Comesaña para animar a su jugador. El tenista sonrió ante el comentario de su técnico, mostrando su mejoría ante otro episodio vergonzoso en el Masters 1000 de Cincinnati. Sin embargo, la organización no ha tomado ni una sola medida. Cero.

No es la primera vez que sucede esto en el torneo. Ni siquiera la primera en las últimas 24 horas. Y es que este mismo lunes, Arthur Rinderknech se desmayó en pleno partido ante Felix Auger-Aliassime por el sofocante calor y humedad que hacía en pista. El tenista francés se acabó retirando del encuentro, al no verse con la energía para seguir.

Las imágenes fueron impactantes. Rinderknech se tumbó en el suelo, en el poco espacio con sombra que había en pista, con una toalla cubriéndole la cara. Tras tomar un poco de agua, se recuperó y siguió jugando, pero dos juegos más tarde dijo basta. En aquel momento, la temperatura era de 32 grados centígrados con más de un 50% de humedad.

Rinderknech se retira en Cincinnati tras desplomarse a mitad de partido
Rinderknech se retira en Cincinnati tras desplomarse a mitad de partido / Tennis TV

«Un día un tenista va a morir y ahí van a ver«, comentó durante un partido hace dos años Daniil Medvedev, que siempre ha sido muy duro con las organizaciones y ha criticado las condiciones en las que juegan los tenistas. El jugador ruso, de hecho, metió la cabeza en una de las neveras donde guardan las bebidas para los tenistas, en el partido en el que fue eliminado por Adam Walton.

Todo esto cuando hay alerta roja de temperaturas elevadas también en el US Open. La ola de calor que habrá a finales de agosto y principios de septiembre en Nueva York amenaza con alcanzar los 38 grados centígrados en las horas más calurosas del día. Unas condiciones inhumanas para jugadores que pueden llegar a jugar cinco horas en pista en partidos de Grand Slam.

Las temperaturas ya no solo afectan a los tenistas, sino también al público y todos los trabajadores que forman parte del torneo y deben acudir a pista. Los desmayos, golpes de calor y mareos son una constante durante los meses de verano y no se pone ninguna medida al respecto. Los jugadores van a acabar diciendo basta.

 Diario de Mallorca – Deportes

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