El partido entre el Mallorca y el Real Madrid (3-0) acabó en tangana final. Jugadores de ambos equipos se lanzaron insultos y recriminaciones tras señalar el final del encuentro el árbitro, casi inmediatamente después de que el conjunto de Ancelotti marcara el último gol. Un tanto que evidenció la tensión que se vivió durante muchos minutos del partido, especialmente en una banda derecha en la que Maffeo se vio las caras con Vinicius y con Bellingham. El partido entre el Mallorca y el Real Madrid (3-0) acabó en tangana final. Jugadores de ambos equipos se lanzaron insultos y recriminaciones tras señalar el final del encuentro el árbitro, casi inmediatamente después de que el conjunto de Ancelotti marcara el último gol. Un tanto que evidenció la tensión que se vivió durante muchos minutos del partido, especialmente en una banda derecha en la que Maffeo se vio las caras con Vinicius y con Bellingham.
El partido entre el Mallorca y el Real Madrid (3-0) acabó en tangana final. Jugadores de ambos equipos se lanzaron insultos y recriminaciones tras señalar el final del encuentro el árbitro, casi inmediatamente después de que el conjunto de Ancelotti marcara el último gol. Un tanto que evidenció la tensión que se vivió durante muchos minutos del partido, especialmente en una banda derecha en la que Maffeo se vio las caras con Vinicius y con Bellingham.
Fue precisamente el futbolista inglés, tras marcar el Real Madrid el 3-0, el que originó la bronca tras darle una colleja a Maffeo. Un acción que provocó la respuesta del mallorquinista y la intervención de otros jugadores bermellones para recriminar la acción al inglés, como Abdón Prats. Rudiger, Dani Rodríguez, Mascarell, Ceballos, Lucas Vázquez o Camavinga también tomaron parte en los incidentes, algunos de ellos para evitar que se llegara más lejos.
El defensa Raúl Asencio fue uno de los protagonistas en los hechos, dirigiéndose a los futbolistas del Mallorca y en especial a Maffeo, con el que tuvo un enfrentamiento dialéctico. El canterano madrisista fue el objeto de las críticas de los bermellones, entre ellos el capitán Dani Rodríguez.
Auxiliares y miembros de los cuerpos técnicos de ambos equipos actuaron de inmediato para calmar los ánimos, algo que se consiguió no sin esfuerzo. Al final, los jugadores acabaron marchándose al vestuario y dialogando muchos de ellos sobre lo sucedido en esos instantes.
Y Maffeo lo hizo conversando con Carlo Ancelotti, técnico del Real Madrid, al que le recriminó la acción de Bellingham y las palabras de Asencio.
Diario de Mallorca – Deportes