«Dentro de que es una alegría insuperable, siento una gran decepción». En esta ambivalencia se muestra Juan Roca, uno de los 200 fundadores del CD Sant Jordi y su primer presidente. «No iré a ver el partido de Copa del Rey contra Osasuna a Son Malferit», continúa de una forma rotunda, mientras, Jaume Gelabert, máximo dirigente del club desde 2002, trata de que cambie de opinión: «Le he dicho que tiene que venir. No hay manera de convencerlo». Pero Roca le replica: «Que me hagan ir allí después del esfuerzo que hemos hecho durante 50 años todas las directivas sacando lo mejor siempre y me tenga que ir allí por el capricho del que sea… Me da igual de quién sea. ¿Quieres que sufra todo el tiempo? No sé si veré el partido». Y Gelabert le contesta: «Es la Real Federación Española de Fútbol (RFEF)». «Dentro de que es una alegría insuperable, siento una gran decepción». En esta ambivalencia se muestra Juan Roca, uno de los 200 fundadores del CD Sant Jordi y su primer presidente. «No iré a ver el partido de Copa del Rey contra Osasuna a Son Malferit», continúa de una forma rotunda, mientras, Jaume Gelabert, máximo dirigente del club desde 2002, trata de que cambie de opinión: «Le he dicho que tiene que venir. No hay manera de convencerlo». Pero Roca le replica: «Que me hagan ir allí después del esfuerzo que hemos hecho durante 50 años todas las directivas sacando lo mejor siempre y me tenga que ir allí por el capricho del que sea… Me da igual de quién sea. ¿Quieres que sufra todo el tiempo? No sé si veré el partido». Y Gelabert le contesta: «Es la Real Federación Española de Fútbol (RFEF)».
«Dentro de que es una alegría insuperable, siento una gran decepción». En esta ambivalencia se muestra Juan Roca, uno de los 200 fundadores del CD Sant Jordi y su primer presidente. «No iré a ver el partido de Copa del Rey contra Osasuna a Son Malferit», continúa de una forma rotunda, mientras, Jaume Gelabert, máximo dirigente del club desde 2002, trata de que cambie de opinión: «Le he dicho que tiene que venir. No hay manera de convencerlo». Pero Roca le replica: «Que me hagan ir allí después del esfuerzo que hemos hecho durante 50 años todas las directivas sacando lo mejor siempre y me tenga que ir allí por el capricho del que sea… Me da igual de quién sea. ¿Quieres que sufra todo el tiempo? No sé si veré el partido». Y Gelabert le contesta: «Es la Real Federación Española de Fútbol (RFEF)».
Cuando el club se clasificó para jugar la Primera Ronda de la Copa del Rey, todos se pusieron manos a la obra para preparar el estadio. «L’Ajuntament de Palma y la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB) nos han ayudado mucho. En la revisión de la inspección del campo, nos dijeron que no se podía jugar aquí porque un camión no podía llegar abajo. Es matar la ilusión de todo el mundo. No pudimos discutir nada. Nos han hecho una faena. Todo el CD Sant Jordi está muy enfadado y el pueblo, también. Contra esto no podemos hacer esto. Ha llegado un punto en el que las televisiones tienen demasiado poder», cuenta Gelabert.
Esa sensación de injusticia es lo que siente Roca, que fundó el club junto a 200 personas más en 1974. «El embrión está el 15 de agosto en las fiestas del Pollo de Sant Jordi. Lo oficializamos en septiembre y la FFIB nos dijo que no nos podían dar plaza en Tercera Regional, así que jugamos en una categoría que se llamaba Educación y Descanso, que era una especie de liga para empresas. Éramos muy jóvenes todos», recalca.
« No teníamos campo cuando pusimos en marcha el CD Sant Jordi. Nadie nos quería alquilar un terreno para que hubiera un campo de fútbol. Empezamos a jugar en un sembrat. Para mí una de las cosas que nos unieron muchísimo es que al no tener terreno de juego cuando comenzamos a prepararlo en las afueras del pueblo fue un gusto. Fuimos 50-60 personas todas las noches de gratis a trabajar», subraya y recuerda una anécdota más: «Me acuerdo la primera vez que visitamos a un equipo que vestía de rojo (que es su color), el sábado fui a comprar camisetas verdes de mi bolsillo porque no teníamos».
Los sentimientos de Gelabert son similares: « Siento una alegría de dónde hemos llegado. Estoy muy contento por ellos. Los pequeños de la escoleta tienen una ilusión… Hay gente que se ha esforzado mucha para llegar aquí. Ahora es muy bonito, pero ha habido momentos que llegaba abril y mayo y no podíamos pagar a los árbitros. Hay un 1% de posibilidades de ganar a Osasuna, pero si lo hacemos te puedo asegurar que el próximo lo jugamos aquí o no lo disputaremos».
Diario de Mallorca – Deportes
