Isma Fagir, futbolista de origen palestino: «Mi familia puede morir bombardeada en cualquier momento»

Estuvo en la cantera del Oviedo, fichó por el filial de Las Palmas y regresó a Asturias hace un par de veranos. Tras jugar en el Marino e hincharse a meter goles en el Tuilla, Isma Fagir (Oviedo, 1998) intenta ahora hacerse un hueco en el Llanera. Sin embargo, tiene cosas infinitamente más importantes de las que preocuparse que el fútbol. Estuvo en la cantera del Oviedo, fichó por el filial de Las Palmas y regresó a Asturias hace un par de veranos. Tras jugar en el Marino e hincharse a meter goles en el Tuilla, Isma Fagir (Oviedo, 1998) intenta ahora hacerse un hueco en el Llanera. Sin embargo, tiene cosas infinitamente más importantes de las que preocuparse que el fútbol.  

Estuvo en la cantera del Oviedo, fichó por el filial de Las Palmas y regresó a Asturias hace un par de veranos. Tras jugar en el Marino e hincharse a meter goles en el Tuilla, Isma Fagir (Oviedo, 1998) intenta ahora hacerse un hueco en el Llanera. Sin embargo, tiene cosas infinitamente más importantes de las que preocuparse que el fútbol.

Hábleme de su padre.

Nació en Dura, una ciudad de Cisjordania. Mi madre es de aquí, de Oviedo. Mi padre vino joven, con diecisiete o dieciocho años, a estudiar Medicina a España. Pero no terminó la carrera y vino a Oviedo a hacer Fisioterapia, y aquí conoció a mi madre.

¿Cómo está viviendo su padre lo que está sucediendo en su país?

Imagínese. La situación es muy complicada. La gente piensa que todo esto empezó hace un año, pero el genocidio comenzó hace muchísimo tiempo. Genocidio es una palabra fea, pero para mí, mi familia y el pueblo palestino esto que está ocurriendo es eso. No hay derecho ni tiene perdón lo que la gente está viviendo. Estoy en contacto permanente con la familia que tengo allí. Afortunadamente todos están bien, dentro de lo que cabe, pero están bloqueados, sin poder salir de la ciudad ni recibir agua ni luz: no tienen vida.

¿Dónde se encuentran sus familiares que permanecen en Palestina?

Están en Dura. Es una ciudad pequeñita, no es Madrid ni Barcelona. Se ve muy acogedora, aunque es seca, como la mayoría de lugares de la zona, porque llueve poco. Hay muchas plantaciones de olivos. Es un sitio bastante guapo y me encantaría visitarlo, pero nunca he podido ir.

Decía que no ha tenido que lamentar la muerte de ningún ser querido.

No hemos tenido noticia de que haya muerto ninguno. Y eso que mi padre tiene once hermanos…

¿Conoce físicamente a su familia paterna?

Sí, he estado con casi todos mis tíos, y con mis primos suelo hablar por videollamada.

¿Han sufrido algún bombardeo en Dura?

Tengo entendido que no, pero puede pasar en cualquier momento. Viven en un bloqueo permanente, con muchísimos controles…

¿Se siente palestino?

Sí. Desde que he conocido la historia de Palestina y de mi padre me siento palestino. Además, tengo familia allí y la familia lo es todo. Es difícil asimilar lo que está pasando y no poder ayudar, desde aquí solo puedo esperar a que todo se arregle, pero parece que la solución no está cerca.

Como persona de origen palestino afincada en un país occidental como España, ¿cuál es su visión global del conflicto? Antes insistía en que el problema viene de lejos.

Supongo que en España habrá dos puntos de vista, quienes apoyan a Israel y quienes apoyan a Palestina. Creo que a hay un poco de desinformación respecto a la guerra. Como le decía, la gente piensa que esto empezó con lo que hizo Hamás hace un año. Eso no es verdad. El territorio palestino está siendo ocupado y nuestro pueblo masacrado desde que los judíos fueron expulsados de Europa en la década de 1940. Hay personas que no saben eso y que piensan que los palestinos son unos terroristas que matan judíos. Nosotros solo queremos que esto pare pronto, que dejen de morir niños, mujeres y hombres. Esto no es humano y la comunidad internacional no está poniendo todo de su parte para parar el conflicto; hay terceros países que están agravando la situación.

¿Nunca se ha planteado jugar con la selección de Palestina?

Hablamos hace cuatro, cinco años, pero al final no se dio. Fue en la época del covid, cuando estaba en Las Palmas. Estaría encantado de poder representar al país de mi padre y a mi país, sería un honor para mí.

Su equipo, el Llanera, está remontando después de un inicio complicado de temporada.

Los resultados al principio no estaban siendo justos con nosotros. Estábamos compitiendo bien, pero nos faltaba acierto en las áreas. Hemos mejorado ahí y ahora llevamos unos partidos sacando buenos resultados.

En lo personal, le está costando entrar en el equipo. ¿Por qué?

Llevo tocado desde la pretemporada, sin continuidad en los entrenamientos ni en los partidos. En los últimos años estoy luchando contra problemas musculares, roturas de fibras constantes me generan una fibrosis que no me permite esprintar a tope ni estar cómodo al 100%.

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