Esta jueves noche, el luchador hispanogeorgiano Ilia Topuria se ha convertido en el centro de atención al visitar el plató de ‘El Hormiguero‘ de la mano de Pablo Motos y las icónicas hormigas Trancas y Barrancas. En la entrevista sincera y llena de emociones, Topuria ha repasado su reciente victoria sobre el estadounidense Max Holloway, a quien noqueó el pasado 26 de octubre en Abu Dabi, revalidando su título como campeón mundial de peso pluma de la UFC.
Topuria, de 26 años, nació en Alemania, hijo de padres georgianos, y se mudó a Alicante durante su adolescencia, donde comenzó a forjar su camino en las artes marciales mixtas. Con 16 victorias y 0 derrotas, se ha ganado el respeto del mundo deportivo. Pablo Motos lo ha recibido con entusiasmo: «El invitado de esta noche se está convirtiendo en una leyenda dentro de las artes marciales mixtas… ¡el campeón del mundo de la UFC, Ilia Topuria!«, ha proclamado. La entrada de Topuria al plató ha estado marcada por un caluroso abrazo y ovación, reflejo del cariño que el público siente por el luchador.
Con una sonrisa y evidente satisfacción, Topuria ha comentado sobre su triunfo ante Holloway, un desafío que muchos consideraban inalcanzable: «Imposible para algunos, pero yo siempre digo: si alguien lo ha hecho, yo también puedo; si nadie lo ha hecho, seré el primero. Y así fue«, ha afirmado con determinación. Uno de los momentos más emotivos de la entrevista ha sido cuando Topuria ha rememorado sus inicios en el deporte. Con humildad, ha confesado que al principio no destacaba: «Yo no era talentoso. Siempre estaba constipado y era muy flaco. En mi familia, incluso, sugerían que cambiara de deporte. Pero me negué, pedí más tiempo para demostrar de lo que era capaz«. Fue su padre quien lo inspiró a persistir: «Él me hizo creer en mí cuando yo mismo no lo hacía. Eso cambió mi vida para siempre. Fue el mejor regalo que me hizo«.
El sacrificio detrás del éxito de Topuria va mucho más allá de los combates en el octágono. Uno de los retos más duros, según ha relatado, es el proceso de perder peso antes de las peleas. «Es un momento angustiante… no tienes fuerzas ni para guiñar un ojo«, ha expresado. En un caso particular días antes de su último combate, el luchado ha confesado que tuvo que enfrentar un inesperado aumento de peso debido al exceso de un gramo de sal en sus comidas, algo que lo hizo retener agua. «Hay un nivel de precisión extremo en este deporte«, ha explicado. Por otra parte, para Topuria, el sentimiento tras una victoria es inigualable. «No hay palabra para definir esa cantidad de felicidad. Todo el sacrificio, el hambre y el esfuerzo que pasan a ser recompensados… me gustaría que todos experimentaran esa emoción«, ha expresado conmovido a Pablo Motos.
Pese a sus logros, Topuria no pierde la humildad ni el sentido del humor. El hispanogeorgiano ha hablado con Pablo Motos sobre su «comida favorita» tras el pesaje, aunque aclaró que no puede disfrutarla hasta después del combate debido al proceso de rehidratación. «Suele ser pizza o pasta, que es lo que más echo de menos«, ha confesado entre risas. Además, el campeón de la UFC ha sido honesto al admitir que, a pesar de su confianza, las dudas y el miedo forman parte de su vida. «La duda y el miedo siempre están ahí, pero eso es lo que te levanta todos los días. La única forma de vencerlo es a través de la preparación«. En cuanto al apoyo de sus seres queridos, ha comentado que el nivel de compromiso y esfuerzo que muestra en su entrenamiento elimina cualquier duda que puedan tener.
Por otra parte, Topuria ha detallado cómo visualiza diferentes escenarios antes de un combate, preparándose para cualquier circunstancia. «Debo vivir las situaciones malas en mi cabeza para mantener la calma en la realidad«. Su enfoque estratégico lo ha convertido en un luchador metódico y eficaz, capaz de desestabilizar a sus rivales al impedirles desarrollar su juego. Asimismo, en la entrevista Ilia Topuria ha hablado sobre la celebración de su victoria contra Holloway. «Recibí mucho hate antes del combate. Cuando terminé, tomé una taza imaginaria diciendo ‘despierten a Holloway, que yo me estoy tomando un té’«, ha bromeado.
Al ser preguntado sobre futuros enfrentamientos, Topuria no ha tenido reparos en señalar su interés por enfrentarse a Islam Makhachev, un rival reconocido. Sin embargo, ha dejado claro que no tiene intención de medirse con Conor McGregor, a quien ha considerado «acabado» en el plano deportivo. «Beber parece su nuevo deporte«, ha ironizado. Finalmente Topuria también ha expresado su emoción por la llegada de la UFC a Madrid en 2025, prometiendo que dará lo mejor de sí para seguir dejando huella en el deporte.
El campeón del mundo de peso pluma hispanogeorgiano ha acudido al programa de Pablo Motos para hablar sobre su victoria por K.O. ante Max Holloway
Esta jueves noche, el luchador hispanogeorgiano Ilia Topuria se ha convertido en el centro de atención al visitar el plató de ‘El Hormiguero‘ de la mano de Pablo Motos y las icónicas hormigas Trancas y Barrancas. En la entrevista sincera y llena de emociones, Topuria ha repasado su reciente victoria sobre el estadounidense Max Holloway, a quien noqueó el pasado 26 de octubre en Abu Dabi, revalidando su título como campeón mundial de peso pluma de la UFC.
Topuria, de 26 años, nació en Alemania, hijo de padres georgianos, y se mudó a Alicante durante su adolescencia, donde comenzó a forjar su camino en las artes marciales mixtas. Con 16 victorias y 0 derrotas, se ha ganado el respeto del mundo deportivo. Pablo Motos lo ha recibido con entusiasmo: «El invitado de esta noche se está convirtiendo en una leyenda dentro de las artes marciales mixtas… ¡el campeón del mundo de la UFC, Ilia Topuria!«, ha proclamado. La entrada de Topuria al plató ha estado marcada por un caluroso abrazo y ovación, reflejo del cariño que el público siente por el luchador.
Con una sonrisa y evidente satisfacción, Topuria ha comentado sobre su triunfo ante Holloway, un desafío que muchos consideraban inalcanzable: «Imposible para algunos, pero yo siempre digo: si alguien lo ha hecho, yo también puedo; si nadie lo ha hecho, seré el primero. Y así fue«, ha afirmado con determinación. Uno de los momentos más emotivos de la entrevista ha sido cuando Topuria ha rememorado sus inicios en el deporte. Con humildad, ha confesado que al principio no destacaba: «Yo no era talentoso. Siempre estaba constipado y era muy flaco. En mi familia, incluso, sugerían que cambiara de deporte. Pero me negué, pedí más tiempo para demostrar de lo que era capaz«. Fue su padre quien lo inspiró a persistir: «Él me hizo creer en mí cuando yo mismo no lo hacía. Eso cambió mi vida para siempre. Fue el mejor regalo que me hizo«.
El sacrificio detrás del éxito de Topuria va mucho más allá de los combates en el octágono. Uno de los retos más duros, según ha relatado, es el proceso de perder peso antes de las peleas. «Es un momento angustiante… no tienes fuerzas ni para guiñar un ojo«, ha expresado. En un caso particular días antes de su último combate, el luchado ha confesado que tuvo que enfrentar un inesperado aumento de peso debido al exceso de un gramo de sal en sus comidas, algo que lo hizo retener agua. «Hay un nivel de precisión extremo en este deporte«, ha explicado. Por otra parte, para Topuria, el sentimiento tras una victoria es inigualable. «No hay palabra para definir esa cantidad de felicidad. Todo el sacrificio, el hambre y el esfuerzo que pasan a ser recompensados… me gustaría que todos experimentaran esa emoción«, ha expresado conmovido a Pablo Motos.
Pese a sus logros, Topuria no pierde la humildad ni el sentido del humor. El hispanogeorgiano ha hablado con Pablo Motos sobre su «comida favorita» tras el pesaje, aunque aclaró que no puede disfrutarla hasta después del combate debido al proceso de rehidratación. «Suele ser pizza o pasta, que es lo que más echo de menos«, ha confesado entre risas. Además, el campeón de la UFC ha sido honesto al admitir que, a pesar de su confianza, las dudas y el miedo forman parte de su vida. «La duda y el miedo siempre están ahí, pero eso es lo que te levanta todos los días. La única forma de vencerlo es a través de la preparación«. En cuanto al apoyo de sus seres queridos, ha comentado que el nivel de compromiso y esfuerzo que muestra en su entrenamiento elimina cualquier duda que puedan tener.
Por otra parte, Topuria ha detallado cómo visualiza diferentes escenarios antes de un combate, preparándose para cualquier circunstancia. «Debo vivir las situaciones malas en mi cabeza para mantener la calma en la realidad«. Su enfoque estratégico lo ha convertido en un luchador metódico y eficaz, capaz de desestabilizar a sus rivales al impedirles desarrollar su juego. Asimismo, en la entrevista Ilia Topuria ha hablado sobre la celebración de su victoria contra Holloway. «Recibí mucho hate antes del combate. Cuando terminé, tomé una taza imaginaria diciendo ‘despierten a Holloway, que yo me estoy tomando un té’«, ha bromeado.
Al ser preguntado sobre futuros enfrentamientos, Topuria no ha tenido reparos en señalar su interés por enfrentarse a Islam Makhachev, un rival reconocido. Sin embargo, ha dejado claro que no tiene intención de medirse con Conor McGregor, a quien ha considerado «acabado» en el plano deportivo. «Beber parece su nuevo deporte«, ha ironizado. Finalmente Topuria también ha expresado su emoción por la llegada de la UFC a Madrid en 2025, prometiendo que dará lo mejor de sí para seguir dejando huella en el deporte.
Programación TV en La Razón