¿Ha comprado algo por Internet y no le ha llegado lo que esperaba? Esto es lo que debe saber

El Black Friday está ya a la vuelta de la esquina, y es que en apenas dos semanas, el próximo 29 de noviembre, tendrá lugar este evento de consumo tan esperado por muchos. Por tanto, no es de extrañar que siete de cada diez españoles afirmen tener la intención de realizar alguna compra durante el «viernes negro» para aprovechar las numerosas ofertas de los diferentes establecimientos.

Muchos consumidores aprovecharán el canal online para realizar dichas compras durante este día. El comercio electrónico avanza imparable, puesto que cada vez más personas prefieren comprar a cualquier hora y día sin la necesidad de moverse del sofá. Tanto es así, que el gasto medio realizado por los españoles en compras online alcanzó los 3.476 euros en 2023, lo que supone un 10% más en comparación con el año anterior.

Aunque adquirir los productos con tan solo un clic resulta atractivo para los consumidores, también lo es para los ciberdelincuentes, que aprovechan esta fiebre de consumismo generalizado para intentar timar a aquellos más vulnerables y hacerse así con sus datos personales y dinero.

«Si has hecho un pago por un producto o servicios online con tu tarjeta de débito o crédito y no has recibido por lo que has pagado, podrías haber sido víctima de una web fraudulenta», explican desde el blog de Finanzas para todos. Y recuerdan que, en estos casos, «las entidades bancarias son ajenas a cualquier tipo de engaño» que los consumidores puedan sufrir durante la operación.

Las operaciones realizadas con la tarjeta son mandatos de pago irrevocables, por lo que las entidades financieras no están facultadas para realizar una devolución del importe pagado sin tener el consentimiento del beneficiario, escenario que no es muy probable que ocurra en el caso de que se produzca un fraude.

Si el consumidor va a la devolución del cargo de tarjeta a su banco, desde este blog aseveran que «la responsabilidad de este se limitará a la gestión diligente de la reclamación ante la sociedad propietaria del sistema (VISA, MasterCard,…) para la comprobación de la autenticación de la operación». En el caso de que se autorizase el pago de buena fe, lo normal es que el consumidor ponga de manifiesto su conformidad, y, entonces, la única forma de conseguir la devolución de lo que se ha pagado sería a través del consentimiento del beneficiario.

Por tanto, para no caer en la trampa de los estafadores durante el Black Friday se deberán extremar las precauciones al realizar compras en páginas no conocidas o en algunas plataformas de compraventa que no le ofrezcan garantías a los consumidores.

 Los españoles gastaron, de media, más de 3.400 euros en sus compras online el año pasado  

El Black Friday está ya a la vuelta de la esquina, y es que en apenas dos semanas, el próximo 29 de noviembre, tendrá lugar este evento de consumo tan esperado por muchos. Por tanto, no es de extrañar que siete de cada diez españoles afirmen tener la intención de realizar alguna compra durante el «viernes negro» para aprovechar las numerosas ofertas de los diferentes establecimientos.

Muchos consumidores aprovecharán el canal online para realizar dichas compras durante este día. El comercio electrónico avanza imparable, puesto que cada vez más personas prefieren comprar a cualquier hora y día sin la necesidad de moverse del sofá. Tanto es así, que el gasto medio realizado por los españoles en compras online alcanzó los 3.476 euros en 2023, lo que supone un 10% más en comparación con el año anterior.

Aunque adquirir los productos con tan solo un clic resulta atractivo para los consumidores, también lo es para los ciberdelincuentes, que aprovechan esta fiebre de consumismo generalizado para intentar timar a aquellos más vulnerables y hacerse así con sus datos personales y dinero.

«Si has hecho un pago por un producto o servicios online con tu tarjeta de débito o crédito y no has recibido por lo que has pagado, podrías haber sido víctima de una web fraudulenta», explican desde el blog de Finanzas para todos. Y recuerdan que, en estos casos, «las entidades bancarias son ajenas a cualquier tipo de engaño» que los consumidores puedan sufrir durante la operación.

Las operaciones realizadas con la tarjeta son mandatos de pago irrevocables, por lo que las entidades financieras no están facultadas para realizar una devolución del importe pagado sin tener el consentimiento del beneficiario, escenario que no es muy probable que ocurra en el caso de que se produzca un fraude.

Si el consumidor va a la devolución del cargo de tarjeta a su banco, desde este blog aseveran que «la responsabilidad de este se limitará a la gestión diligente de la reclamación ante la sociedad propietaria del sistema (VISA, MasterCard,…) para la comprobación de la autenticación de la operación». En el caso de que se autorizase el pago de buena fe, lo normal es que el consumidor ponga de manifiesto su conformidad, y, entonces, la única forma de conseguir la devolución de lo que se ha pagado sería a través del consentimiento del beneficiario.

Por tanto, para no caer en la trampa de los estafadores durante el Black Friday se deberán extremar las precauciones al realizar compras en páginas no conocidas o en algunas plataformas de compraventa que no le ofrezcan garantías a los consumidores.

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