El relanzamiento del Manchester City pasa por tener dos Peps en lugar de uno. Pep Guardiola ha fichado otro Pep: Pep Lijnders. El apellido les diferenciará, también su origen (uno catalán, el otro neerlandés) y el nombre real: Josep y Pepijn. La dualidad es una anécdota: el meollo es que el nuevo fichaje citizen ha sido durante diez años técnido del Liverpool. Con la rivalidad que ha existido. El relanzamiento del Manchester City pasa por tener dos Peps en lugar de uno. Pep Guardiola ha fichado otro Pep: Pep Lijnders. El apellido les diferenciará, también su origen (uno catalán, el otro neerlandés) y el nombre real: Josep y Pepijn. La dualidad es una anécdota: el meollo es que el nuevo fichaje citizen ha sido durante diez años técnido del Liverpool. Con la rivalidad que ha existido.
El relanzamiento del Manchester City pasa por tener dos Peps en lugar de uno. Pep Guardiola ha fichado otro Pep: Pep Lijnders. El apellido les diferenciará, también su origen (uno catalán, el otro neerlandés) y el nombre real: Josep y Pepijn. La dualidad es una anécdota: el meollo es que el nuevo fichaje citizen ha sido durante diez años técnido del Liverpool. Con la rivalidad que ha existido.
Empieza la segunda revolución en el City, la conversión 2.0, después de que la temporada haya terminado con el equipo en tercer lugar de la Premier, la misma clasificación que motivó la primera. Los efectos de esa transformación deberían verse a partir de este miércoles, cuando los celestes debuten en el Mundial de Clubs frente al Wydad Casablanca de Marruecos en Filadelfia (18 h.).
Será muy pronto, sin embargo, para conocer si será el City que acabó hace tres semanas la novena campaña de Guardiola o el equipo que inaugurará la décima con el técnico de Santpedor. Lijnders, de 43 años, ejercerá de segundo entrenador y se encargará de la programación de los entrenamientos.

El Pep catalán también ha incorporado a otro extécnico del Liverpool, James French, tiznando de rojo el azul cielo de la camiseta, y que se encargará de las jugadas a balón parado. No ha habido recelos ni controversias en el traslado desde Anfield al Etihad.
Lijnders se marchó con Klopp, y fichó por el Salzburgo, que le despidió en diciembre. La falta de acuerdo para la rescisión (tenía dos años de contrato), impidió que aceptara en mayo la oferta del Norwich. Una semana más tarde le llamó Guardiola y pactaron su nueva e insólita relación. Insólita porque los segundos de Pep tenían vínculos afectivos previos con él. La tercera incorporación al grupo es Kolo Touré, exjugador del City y del Liverpool. Hermano de Yaya Touré, exdiscípulo de Pep en el Barça y cuyo representante, Dimitri Seluk rajó del entrenador en su día.
A Manchester viajó acompañado con Domènec Torrent, que ya era su adjunto en el Barça y en el Bayern Múnich, junto con Carles Planchart, Lorenzo Buenaventura y Manel Estiarte, que son los únicos que resisten a su lado. Mikel Arteta se incorporó al original cuerpo técnico, recién retirado, en 2016, y duró hasta 2019 cuando le ofrecieron el banquillo del Arsenal. Un año antes (2018) se había marchado Torrent, que también está en el Mundial de Clubs al frente del Rayados de Monterrey, donde juegan Sergio Ramos y Sergio Canales.
Al lado de Pep se sentaron, además, Rodolfo Borrell, que ya estaba en el City, y Enzo Maresca, el actual jefe del Chelsea, entre las dos etapas de Juanma Lillo (20-22 y 23-25), que deja el club junto con su ayudante Iñigo Domínguez. Asimismo, se ha marchado de Manchester Carlos Vicens, el responsable de las jugadas de estrategia, que se ha convertido en el primer entrenador del Braga.

Loa dos Peps contactaron con amigos y conocidos antes de darse el sí. Klopp, por supuesto, les atendió a ambos y seguramente les empujó a unirse. El catalán convenció convenció al neerlandés a la primera sobre el trabajo y futuras responsabilidades, aunque Lijnders tuvo la deferencia añadida, innecesaria, de hablar con Arle Slot, el sustituto de Klopp en el Liverpool y viejo amigo y compatriota cuando éste iniciaba su carrera en el Cambuur, modestísimo equipo de los Países Bajos.
Por una vez, en el City hay tantos fichajes de calado en la banda como en el rectángulo de juego. La nueva época comienza ya con Hugo Viana ejerciendo de director técnico en sustitución de Txiki Begiristain, que se ha retirado. Viana, portugués de 43 años procedente del Sporting de Lisboa, es quien aparece en las fotos de los nuevos fichajes.

Uno por línea. Ha posado junto a Marcus Bettinelli, portero inglés de 33 años, que ha llegado libre procedente del Chelsea; el lateral izquierdo argelino Rayan Aït Nouri, del Wolverhampton (24 años y 36,8 millones de coste); el centrocampista neerlandés Tijani Reijnders (26) y por quien se han pagado 55 millones más 15 en variables al Milan y el extremo francés Rayan Cherki (21), procedente del Lyon previo pago de 36,5 millones.
Un total de 128,3 millones se cargan en la cuenta de Viana por cuatro jugadores; algo menos de lo que costará el alemán Florian Wirtz cuando el Liverpool acepte el precio fijado por Bayer Leverkusen más las variables, aún por sumar.

Los cuatro nuevos vienen a complementar el rejuvenecimiento emprendido por Begiristain en el mercado de invierno, adelantado en parte por el alud de lesiones que diezmaron a la plantilla.
El primero fue Nico González (60 millones) para intentar cubrir, sin éxito, el enorme vacío que dejó Rodri, presto y recuperado ya para retomar el timón. Apareció desde el Palmeiras el brasileño Vitor Reis con 19 años (37 millones) y llegó desde Francia, con 20, el uzbeko Abdukodir Khusanov (40 millones al Lens). El más caro fue el más productivo: Omar Marmoush costó 75 millones, que se pagaron al Eintracht Frankfurt. Ya contrastado (26 años), sin sus goles no habría llegado al City al tercer lugar que garantizaba la participación en la próxima Champions. Incluso fue reclamado el argentino Claudio Echeverri, comprado en enero de 2024 y que estaba cedido en el River Plate, para que echara una mano.

“Cada año es más complicado clasificarse, es el título más importante en Inglaterra», dijo Guardiola antes de jugar el Trophy Legends de golf que él apadrina en sus breves vacaciones. Ahora anda en Estados Unidos sin los viejos emblemas de su etapa (Kevin de Bruyne firmó por el Nápoles, Ilkay Gündogan puede ir al Galatasaray, Kyle Walker y Jack Grealish se quedaron en Inglaterra) deseoso de demostrarse a sí mismo que es capaz de encumbrar de nuevo al City. Ahora serán dos Peps.
Diario de Mallorca – Deportes