Frank Cuesta empieza el 2025 patas arribas. El herpetólogo se enfrenta a un nuevo desafío en Tailandia tras una denuncia anónima que afecta tanto a su santuario de animales, el Santuario Libertad, como a su permanencia en el país. En un reciente directo, Cuesta compartió imágenes de agentes policiales y vehículos en la puerta de sus instalaciones, señalando que la denuncia proviene de alguien que, según él, desea verlo fuera del país a toda costa.
Lo quieren fuera de Tailandia
Aunque evitó dar nombres, instó a sus seguidores a no tomar represalias contra nadie. «Oficialmente es una denuncia anónima, pero está dirigida contra mí», declaró. Esta situación no es un caso aislado, ya que Cuesta ha enfrentado previamente tensiones legales relacionadas con el santuario, especialmente con su exesposa, Yuyee, en disputas sobre la propiedad de las tierras. Tras años de batalla, Cuesta tuvo que pagar nuevamente por los terrenos para que estos pasaran a nombre de su hijo, Zorro, debido a las restricciones legales para extranjeros en Tailandia.
El reciente episodio ha sido descrito por Cuesta como una experiencia desagradable, a pesar de la cortesía de los oficiales involucrados. Aseguró que las operaciones del santuario están en regla y que la denuncia no tiene fundamento legal. Sin embargo, señaló que esta situación lo obliga a replantearse el futuro de sus proyectos. «Voy a paralizar nuevas inversiones y mejoras hasta tener claridad«, afirmó. Cuesta también advirtió sobre las implicaciones de posibles acciones legales, tanto para él como para su familia, especialmente para su hijo Zorro, actual propietario de las tierras. Aunque anunció que planea contraatacar con pruebas contundentes, como un video que presentará a las autoridades, expresó su preocupación por el impacto emocional en sus seres cercanos. «Siempre serás un extranjero aquí», reflexionó sobre las dificultades de operar en un entorno donde las denuncias podrían ser utilizadas con intenciones maliciosas. A pesar de todo, reafirmó su disposición a seguir luchando por su causa y por quienes dependen de él.
El herpetólogo fue sorprendido a las afueras de su Santuario con la presencia de policías y comentó que ha recibido una «multi denuncia anónima pero que peleará hasta el final»
Frank Cuesta empieza el 2025 patas arribas. El herpetólogo se enfrenta a un nuevo desafío en Tailandia tras una denuncia anónima que afecta tanto a su santuario de animales, el Santuario Libertad, como a su permanencia en el país. En un reciente directo, Cuesta compartió imágenes de agentes policiales y vehículos en la puerta de sus instalaciones, señalando que la denuncia proviene de alguien que, según él, desea verlo fuera del país a toda costa.
Aunque evitó dar nombres, instó a sus seguidores a no tomar represalias contra nadie. «Oficialmente es una denuncia anónima, pero está dirigida contra mí», declaró. Esta situación no es un caso aislado, ya que Cuesta ha enfrentado previamente tensiones legales relacionadas con el santuario, especialmente con su exesposa, Yuyee, en disputas sobre la propiedad de las tierras. Tras años de batalla, Cuesta tuvo que pagar nuevamente por los terrenos para que estos pasaran a nombre de su hijo, Zorro, debido a las restricciones legales para extranjeros en Tailandia.
El reciente episodio ha sido descrito por Cuesta como una experiencia desagradable, a pesar de la cortesía de los oficiales involucrados. Aseguró que las operaciones del santuario están en regla y que la denuncia no tiene fundamento legal. Sin embargo, señaló que esta situación lo obliga a replantearse el futuro de sus proyectos. «Voy a paralizar nuevas inversiones y mejoras hasta tener claridad«, afirmó. Cuesta también advirtió sobre las implicaciones de posibles acciones legales, tanto para él como para su familia, especialmente para su hijo Zorro, actual propietario de las tierras. Aunque anunció que planea contraatacar con pruebas contundentes, como un video que presentará a las autoridades, expresó su preocupación por el impacto emocional en sus seres cercanos. «Siempre serás un extranjero aquí», reflexionó sobre las dificultades de operar en un entorno donde las denuncias podrían ser utilizadas con intenciones maliciosas. A pesar de todo, reafirmó su disposición a seguir luchando por su causa y por quienes dependen de él.
Programación TV en La Razón
